Las seis imágenes originales de los dragones fueron retiradas de la Casa durante la Segunda República por lo que tras siete décadas de ausencia, las réplicas de cuatro de ellos volvieron al mismo lugar que ocuparon sus antecesores.
El autor de estas cuatro reproducciones ha sido el artista Antonio Romero Vallejo que nació en nuestra ciudad en 1.958 y que en la actualidad trabaja para la Autoridad Portuaria.
El primer problema para su creación fue el buscar imágenes de la época que mostrasen como eran los originales. La mayor parte de fotografías de la Casa de los Dragones muestran la misma sin los dragones. Solo en un par de ellas se pueden adivinar como eran, pero son imágenes muy alejadas y de poca calidad por lo que el diseño del modelo original fue de gran dificultad.
Antonio Romero comenzó su construcción el 26 de junio de 2.006. Para ello precisó de la creación de manera artesanal y en la terraza de su casa de este primer modelo fabricado con un perfil de madera al que le fue añadiendo corcho blanco y escayola para darle el volumen deseado. Una vez terminado el modelo, se creó a partir de él un molde de poliester formado por piezas atornilladas.
En el mes de octubre ese molde fue despiezado y trasladado a una nave industrial de nuestra ciudad para a partir de él crear los cuatro dragones fabricados en resina, fibra, marmolina y tinte negro. Posteriormente fueron cubiertos con pintura de forja para darle un aspecto similar al bronce, pesando cada dragrón a su término unos 150-200 kilos.
El día 6 de noviembre fueron instalados en la cornisa del edificio siendo inaugurados junto con la fachada restaurada el día 10 de Noviembre de 2.006